La tecnología RICOH, desde hace años, comenzando con
la emblemática FT6645 analógica, introdujo el concepto de particionar el
control de proceso de copiado en dos grandes estrategias. Una que se encargue
de monitorear y ajustar la condición de carga del cilindro y otra que monitoree
y mantenga la cantidad necesaria de toner en la unidad de revelado.
Al primero se lo denominó Control de Imagen Latente
(CIL) y al segundo se lo llamó Control de Densidad de Imagen (CDI) y más
recientemente en la bibliografía técnica proporcionada por el fabricante se lo renombró
como Control de Suministro de Toner (CST) pero básicamente CDI y CST se
refieren a lo mismo.
Hay un tercer control, que es el que ocupa el tema de
este artículo que funciona en paralelo a estos dos que se denomina Control
Automático de Potencia (del laser) APC por sus siglas en inglés (Auto Power
Control).