Si bien el siguiente artículo intenta ser lo más general posible, está basado en la tecnología aplicada por RICOH en sus fotocopiadoras tanto analógicas como digitales y que además es el sistema más ampliamente utilizado por otros fabricantes.
Independientemente de la manera en la que se obtenga la información de la imagen a fotocopiar, esto es, por reflexión directa de la luz proveniente del original (proceso analógico) o bien por incidencia de la misma sobre un sensor de imagen (proceso digital), en toda fotocopiadora se debe generar lo que se conoce como imagen latente sobre un cilindro fotoconductor que será el vínculo entre la sección óptica (escáner) y la de revelado. Esta imagen latente es una réplica invisible de la imagen original y está formada por cargas eléctricas distribuidas en la superficie del cilindro con una densidad que guarda una relación con los tonos de grises de la imagen. Posteriormente, la rotación del cilindro hará que se revele dicha imagen al pasar frente a la unidad de revelado a causa de fuerzas de atracción entre toner y el cilindro. Según la fotocopiadora sea analógica o digital, dicha imagen junto con su proceso de generación es diferente. A continuación de detallan las particularidades propias de cada uno.
